sábado, 26 de noviembre de 2011

CUANDO DIOS APRIETA

DIOS APRIETA PERO NO AHORCA.


Sin duda usted y yo hemos escuchado este refrán varias veces o al menos una vez en la vida. ¿Pero se ha puesto a pensar en lo que significa?

Cuando alguien está pasando por una situación adversa en su vida y no “ve la salida”, se le suele decir “no te preocupes, Dios aprieta pero no ahorca”.

¿Cómo es que existen personas que pueden pasar por situaciones adversas y salir de ellas triunfantes? La respuesta es: el conocimiento que adquirieron antes de entrar a la adversidad y su actitud.

Todos los seres humanos nacimos con un órgano de almacenamiento y procesamiento de información increíble; su cerebro (si, ¡su esposo también tiene uno!). La capacidad de almacenar y procesar información ¡es infinito!.

Su cerebro es una supercomputadora donde usted puede ingresar información todos los días de su vida y nunca terminará de llenarse. NUNCA....

En todas las áreas de su vida usted necesita conocimiento. En su trabajo, en su escuela, en su matrimonio, en su profesión, en su oficio, en cualquier cosa a la que usted se dedique necesita conocimiento. El conocimiento no se da solo, no surge por arte de magia; el conocimiento se adquiere.

Aquí le comparto algo que debe de saber: “La adversidad es directamente proporcional a la fuerza que hay en ti para superarla”.

Es su responsabilidad alimentarse de conocimiento y de la calidad de estos. Dese cuenta que usted toma decisiones, actúa, piensa, sueña y razona de acuerdo a los conocimiento que posee y ¡nada más! . De ahí la importancia de la calidad y cantidad de los conocimientos que poseemos.



La calidad de los conocimientos.

¿Existe calidad en los conocimientos? ¡Claro que sí! .

Considere usted que cuando el conocimiento era que la tierra era cuadrada y no se podía navegar más allá del horizonte; toda la navegación, comercialización naviera y la ciencia se ¡circunscribía a esto!. Esto quiere decir que la forma en que las personas que se dedicaban a la navegación; planeaban, pensaban y tomaban decisiones teniendo como base este conocimiento.

Hoy en día en plena era de la globalización este ejemplo arriba expuesto puede causarnos hasta risa, pero era la cosa más seria en su momento.

Así pues los conocimientos afectan la manera en que tomamos decisiones y enfrentamos la vida. Así que para enfrentar de mejor manera la vida, adquiera conocimiento y tenga una buena actitud con lo que sabe.

Si usted adquiere una buena cantidad de conocimientos de calidad, le permitirá enfrentar los reveses de la vida de manera que salga bien librado y mejorado. Así usted dejara la pasividad en el dicho que lleva por título esta entrada y al pasar la adversidad no quedará sin rumbo, sino que usted tendrá el control desde antes, durante y después.







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